Ni enrocarse ni ir a la defensiva. La mejor defensa es un buen ataque, y en nuestra época, ese ataque debe ser rápido, apremiante, y queda expresado sobre todo por la llamada a la nueva evangelización. En esa línea se clausuró el XII Congreso Católicos y Vida Pública, tanto en su manifiesto final, como en la intervención de Joaquín Navarro-Valls, actual presidente del Consejo Asesor de la Universidad Campus Bio-Médico de Roma y antiguo director de la Oficina de Prensa y Portavoz de la Santa Sede, de 1984 a 2006.

“Después de decenios, siglos, en los que los cristianos han luchado contra la ‘descristianización’, y en el contexto de neopaganismo actual, la fe no puede permanecer a la defensiva”. El cristianismo, afirmó Navarro-Valls, “ya no debe ser visto como una tradición que sobreguardar, sino como la perspectiva de una vida futura que hay que recrear”. La pregunta que hoy ha de interpelar a los creyentes no es “si el cristianismo sabrá sobrevivir”, sino si sabrá “expandirse de nuevo”.

En un mundo de relativismo y miedo a la vida, la principal fuerza del cristiano debe ser, según Navarro-Valls, la irradiación a través de su pensamiento y de su actuar de su encuentro personal con Cristo. “Cuando el cristiano se comporta como cristiano convence siempre”. Pero eso no es automático: “es necesario e inevitable esforzarse por hacer verosímil lo verdadero”. En cualquier caso, no basta con predicar o defender sólo códigos morales o culturales. “A Dios puedo confiarle toda mi vida, a un código moral ni un solo día”, apuntó. Pidió a los poderes públicos “considerar la religión un derecho común indispensable para el bien de todos”

Manifiesto final del Congreso

En los últimos años, el Congreso Católicos y Vida Pública ha decidido presentar un manifiesto que recoja su sentir. En el de este año se destaca que:

"Dado el fuerte secularismo ambiente, nuestro testimonio ha de hacerse presente en el plano de las relaciones, del encuentro, en el diálogo que lleve a “superar la escisión entre conciencia humana y conciencia cristiana, entre existencia en este mundo temporal y apertura a una vida eterna, entre belleza de las cosas y Dios como Belleza”, entre laicidad y fe.

Afirmamos la laicidad del Estado rectamente entendida como la autonomía natural que a éste corresponde en su ámbito, civil y político, frente a las esfera religiosa y eclesial (¡nunca respecto del orden moral!). La auténtica positiva laicidad no sólo no constituye obstáculo a la pública afirmación de Dios --cuyo nombre hemos de hacer resonar de nuevo “gozosamente” en el ámbito público, “bajo los cielos de Europa” y en todo el mundo--, sino que es, por el contrario, exigencia, condición y garantía del efectivo y pleno ejercicio de la libertad religiosa por parte de todos en condiciones básicas de igualdad.

(...) Hemos de manifestar nuestra fe “con alegría, coherencia y sencillez, en casa, en el trabajo y en nuestro compromiso ciudadano”, con el que hemos de testimoniar también nuestra esperanza, mediante la realización de la caridad, arraigados en el tejido social, con una generosa intensa participación, en activa solidaridad, expresión de la dimensión social de nuestra fe, que se traduce en tareas de ordenación sociopolítica, en la denuncia de la injusticia, en la defensa de la dignidad de todas las personas en todo momento, así como en obras de servicio a los hermanos, especialmente a los más débiles y desatendidos, servicio que para el cristiano “no es una mera opción, sino parte esencial de su ser”.

Este Congreso condena de modo absoluto y pide que cese la persecución que en todo el mundo sufren innumerables personas por causa de su fe religiosa. A todas estas personas las vemos hoy representadas en ASIA BIBI cuya libertad inmediata exigimos.

La recta laicidad ha de facilitar, en la presente situación de emergencia educativa y cultural, el desarrollo de una actividad educacional, al mismo tiempo evangelizadora y civilizatoria, que nos lleve a recuperar y legar a las nuevas generaciones “el sentido de lo sagrado” y ofrecerles como patrimonio fundamental “la fe en un Dios creador y providente, la revelación de Jesucristo único salvador y la comprensión común de las experiencias fundamentales del hombre como nacer, morir, vivir en una familia, y la referencia a una ley moral natural”. De este modo podremos superar la antihumanista ruptura moderna y lograr la reconstrucción de una antropología sobre la que llevar a cabo una verdadera educación integral, que conduzca a una felicitante plena realización personal y comunitaria.

Hemos de afirmar una vez más el derecho fundamental de los padres a decidir el tipo de educación que han de recibir sus hijos y el estricto respeto que los poderes públicos han de guardar al legítimo pluralismo determinado por las diversas concepciones últimas de la persona, pluralismo densificado entre nosotros por la creciente intensa y variada inmigración y que debe traducirse en el enriquecimiento de las integradoras bases comunes de convivencia en cuya aceptación hemos de converger a partir de la experiencia humana elemental de necesidades, aspiraciones y deseos básicos radicales comunes en la que todos los hombres han de reconocerse justamente como hombres y como hermanos.

Firmes en la misión, confirmados en la fe, entreguémonos sin reservas a transmitirla con valentía, “siendo cristianos como ciudadanos y ciudadanos como cristianos”, en esta apremiante tarea de la nueva evangelización. YA, SIN DILACIÓN, ¡AHORA!"

Contra la eutanasia

Durante el fin de semana se pudo escuchar la voz de Benigno Blanco, presidente del Foro Español de la Familia, previniendo que “una ley que regule la eutanasia autoriza a un médico a matar a un enfermo y -por tanto- viola el derecho a la vida”. Ante la intención del gobierno español de promulgar una ley sobre "el derecho a la muerte digna" no dudó en que se trata de una puerta a la eutanasia, “una ley profundamente injusta que quebraría aún más nuestra sociedad” y afirmó que “los católicos deben unirse para protestar y defender el derecho a la vida”. También abogó por la familia como el único lugar donde defender la familia de una forma razonable y constató que existe una guerra cultural que divide a la sociedad en dos bandos.

David Pérez, diputado del PP de Madrid, contra el aborto

En la mesa redonda con el tema "¿Qué legado para las nuevas generaciones?” el diputado del Partido Popular en la Asamblea de Madrid y candidato a la alcaldía de Alcorcón, David Pérez, pidió centrarse en dos temas: la defensa a la vida y la recuperación de la libertad. Calificó al aborto como “la eliminación violenta del ser humano” y con su práctica “se están pisoteando los derechos humanos y que por esto, hay un problema humanitario”. “Se tortura a unas vidas que no se pueden defender. Son seres débiles, y por ello, hay que combatir ese ataque a la vida”. Denundió, por otra parte, que “hay un ataque sistemático a la libertad y algunos la consideran como un enemigo a combatir”. Para él, “la reivindicación del individualismo” es una solución. “Hay que buscar la idea del hombre, el ser que es capaz de amar, colaborar, ser solidario, sin necesidad de que se le dicte lo que tiene que hacer”.

La responsable de la sección de Mujer del Pontificio Consejo de Laicos, Ana Villa, anunció que en las Jornadas de la Juventud de Madrid “se verá a la Iglesia como una auténtica familia”. Afirmó que hoy los jóvenes “crecen en un sin sentido”, “en una sociedad sin referencias”, “sin respuestas”. Por eso, “educar en sentido crítico es vital hoy en día”, concluyó.

Teléfonos móviles y esperanza para los cubanos

El miembro del Movimiento Raíces de Esperanza, de Estados Unidos, Miguel Eduardo Cruz, presentó un proyecto de su asociación en Cuba desde 2003: “Cell Phones for Cuba”, en el que colaboran muchos jóvenes voluntarios en EEUU. “Con esta iniciativa los grupos juveniles de la Iglesia podrían organizarse mejor, se podrían transmitir mensajes desde la Jornada Mundial de la Juventud a los jóvenes de Cuba a través de mensajes de SMS y vía Twitter; y por estas vías los sacerdotes podrían ser convocados de forma más rápida para administrar los sacramentos a los enfermos y moribundos”, ha descrito Cruz.

"Para salir de la crisis, más curas", pide el hombre del Santander en Italia

El presidente para las obras de Religión del Vaticano, Ettore Gotti Tedeschi, durante años asesor y representante de Banco Santander en Italia, denunció su sospecha de que la deuda se ha utilizado en Occidente para mantener artificialmente el crecimiento, cuando faltaba el factor que realmente permite crecer: una natalidad que vaya más allá del reemplazo generacional. “En los últimos 15 años el tipo de crecimiento se ha situado en torno al 3%, pero en realidad era de 0, porque si la población no crece no se puede dar un crecimiento real del PIB”, ha señalado.

Aunque ha pasado en Europa y en EEUU hay diferencias: mientras que “en América se ha producido una nacionalización de la deuda privada, en Europa estamos privatizando la pública”. El peso, en este último caso, “cae sobre el ahorro, y no sabemos cuánto tiempo se podrá sostener”. Dio credibilidad a las previsiones de que en 2030 Europa será una entidad económicamente irrelevante y será Asia la que tenga el dominio económico y financiero. "Otra cultura distinta dominará el mundo”, avisó, una cultura que no comprende la existencia “de un Dios creador”. Y cabe preguntarse: “cuál será el respeto a la dignidad de la persona en los próximos años?". “¿Cómo se puede pedir a un político, a un economista o a un banquero que actúen con responsabilidad si la vida no tiene sentido?”, añadió. Así, a juicio de Gotti Tedeschi, el principal déficit es el de doctrina. “Los curas no han enseñado suficiente doctrina”, para salir de la crisis “no necesitamos políticos, economistas, o banqueros, necesitamos curas”

Maciej Giertych, miembro del Instituto de Deontología de la Academia Polaca de Ciencias, denunció otro fenómeno actual: "la adicción a la caridad, ya que los subsidios permanentes nos llevan a la holgazanería”. Aunque no se opone a todas las ayudas gubernamentales, “tienen que hacerse de forma temporal para que la ayuda sea efectiva”.

La periodista asturiana y voluntaria de Cáritas María Teresa Álvarez insistió en que aunque “los católicos deben comprometerse con los pobres y dejar constancia en la sociedad”, también es cierto que “la sociedad justa no puede ser obra de la Iglesia sino de la política. El Estado tiene que velar por la justicia social”.

Domingo Sagranyes, presidente del Consejo de Administración de la Fundación “Centesimus Annus Pro Pontifice” recordó que el ámbito económico “no está exento de decisiones morales y éticas”. Propuso una mayor proactividad en prever los cambios y un sistema de remuneración que promueva la solidaridad. Afirmó que la empresa debería promover las relaciones de reciprocidad entre sus miembros, como puede ser la de la amistad, puesto que “es el hombre entero el que también está presente en las relaciones laborales y por eso debe estar abierto a dicha reciprocidad”.

Jean-Luc Schaffhauser, vicepresidente del Instituto Europeo de Cooperación y Desarrollo y Miembro de la Academia Europea de París, participó en la mesa redonda sobre solidaridad, participación y tejido social. “El hombre trabaja para el hombre; a su vez, éste trabaja para las finanzas, y la economía sirve para las necesidades humanas”, analizó. “Hay una perversión total sistemática profunda en nuestra sociedad y esto lo vemos en la crisis financiera. Hay una perversión de los fundamentos mismos de las sociedad”, afirmó.

La democracia necesita equilibrar "participación" y "representatividad"

El profesor de Derecho Constitucional en la Facultad de Derecho de la UNED, Carlos Vidal, afirmó que “el sistema democrático tiene que mantener la participación social como algo fundamental”, y, al mismo tiempo, tiene que buscar el “equilibrio” entre la participación y la representatividad. Añadió que “los partidos políticos tienen que favorecer la participación social y no ser un obstáculo”. “Los partidos políticos son necesarios pero no tienen que ser únicos y exclusivos”, declaró. El cambio debe hacerse, según él, "desde dentro", y expresó su confianza en que las "nuevas teconologías" mejoren la participación.

Concepción Dancausa, delegada del Área de Gobierno de Familia y Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Madrid, explicó que el Ayuntamiento de la capital tiene registrados 5.000 voluntarios y que “las Asociaciones no Lucrativas son idóneas para la construcción de una sociedad democrática”.

El presidente de la Federación Española de Bancos de Alimentos, Javier Espinosa, afirmó que “la solidaridad no sólo es posible en el tercer sector [el voluntariado, lo no lucrativo], sino que también lo es en la economía”. En su discurso Espinosa ha apostado por “la economía de comunión” que “sirve para ayudar a los pobres, de hecho, nace para ellos”. Pidió construir una "cultura del don", algo que “crea reciprocidad”, por lo que aparecen los bienes de relación dentro de la empresa y esto hace que la gente se sienta mejor dentro de ella y beneficia también al empresario.

Sobre solidaridad, participación y tejido social también habló el presidente de Znak Publishing House, el polaco Henryk Wozniakowski. “La verdadera solidaridad es compartir, no para realizar una justicia ideal, sino para llevar juntos el cargo de la contingencia e insuficiencia humana. Y ésta es la solidaridad que hace el mundo un poco mejor”, afirmó.

Sobre “El testimonio de la esperanza cristiana” habló el Doctor en Bioética por la Regina Apostolorum de Roma, Enzo di Natali, quien señaló que “incluso el mismo Einstein al analizar la naturaleza reconocía la necesidad de ir más allá de la materia al simple cálculo matemático”. Afirmó que “la única luz del mundo es Jesús”; y que nosotros somos instrumento de esa luz y como tal, “para llevar esa luz en nuestro tiempo hace falta oración, formación y acción”.

En la misma mesa habló Moise Cïfende Kaciko, profesor de la Universidad Católica de Bukavu (Ruanda), y director de la ONG Aprodeped (Acción para la Promoción y la Defensa de los Derechos de las Personas Desfavorecidas), una entidad que aporta asistencia jurídica a los indigentes, y prisioneros; y que lucha contra la pena de muerte y la violencia de masa. También ha destacado que surgió para “dar una respuesta cristiana a la miseria, al contexto de la dictadura que vive la población congoleña”. "Hay prisioneros por cuestiones de opinión, niños de las calles, niños en prisión, niños maltratados y buscar justicia ante estas situaciones es lo que intenta nuestra ONG", resumió. "Dios a través de la obra de los cristianos busca dar justicia a los oprimidos", explicó, y por eso, añadió, “debemos ser solidarios, pues nadie es tan pobre como aquel que no tiene nada que dar.”

"Muchos científicos ateos no son fanáticos"

El director de la Universidad Católica de Eichstätt-Ingolstadt, el filósofo checo Nikolaus Lobkowicz, explicó su convicción de que “el hecho de que el hombre descienda del mono o de un ‘lodo primitivo’ no supone un gran problema para un cristiano”. La controversia en esta cuestión sólo aparecería “en el caso de que hubiera que admitir que el hombre apareció por azar”. En su opinión, “no sería difícil encontrar argumentos filosóficos que demostrasen que no fue así como sucedió”. Los católicos, “al contrario que los fundamentalistas”, siempre han estado “interesados en entenderlo todo, y en hacerlo de un modo que incluso los ateos puedan respetarlo”, ha destacado. En orden a que el diálogo sea fecundo, Lobkowicz también ha sugerido que se tenga en consideración el hecho de que “muchos científicos que son ateos no son ateos fanáticos, simplemente no han aprendido nada distinto. Este tipo de persona está dispuesto a escuchar”.

Propuso que los jóvenes católicos de hoy “deberían ser preparados para un futuro, como cristianos, en el que puedan ser expulsados de la vida pública”. En este línea, ha asegurado que “no es impensable” que hoy se pueda dar una “persecución” bien de los cristianos o de otra gente “por el hecho de que haga o deje de hacer algo”.

El abogado Carlos Seco Gordillo criticó la educación en España, por ser "un medio instrumental al servicio del poder público”. Por ejemplo, dijo que “asignaturas como Educación para la Ciudadanía crean un modelo de sociedad que empuja al relativismo, positivismo e ideología de género y crea un sistema constructivo de la conciencia de los jóvenes”. También la nueva asignatura de Ciencias para el Mundo Contemporáneo le parece “tan demoledora o incluso más que la primera”, puesto que “estas asignaturas son los pilares de una obra de ingeniería, que transforma nuestra sociedad desterrando por completo el humanismo cristiano”. Ha recordado que “los padres son los principales responsables de la educación de sus hijos y por lo tanto deben tener libertad de elección ante la enseñanza”.
Otra personalidad del Partido Popular en el encuentro fue Rafael Rodríguez-Ponga, secretario nacional de Participación Social y miembro del Comité Ejecutivo Nacional. Es necesario, djio, “un planteamiento de modelos de convivencia pensados para el futuro”. En su opinión, debe hacerse una propuesta “basada en el humanismo cristiano” en el que prime “el respeto de la persona”. Así se podría garantizar una “convivencia pacífica” en el que “cada uno podrá ser lo que quiera”. Criticó el actual proyecto basado en el socialismo en el que “todos somos iguales”, incluyendo aspectos como la religión y la cultura, un modelo que al final, dijo “evidencia una lucha de poder de clases”. También consideró “inviable” es modelo del nacionalismo en el que “se trata a las personas como territorios”.

La coordinadora del Área de Análisis Social y Desarrollo de Cáritas Española, Ana Abril, destacó que “en esta sociedad todos somos imprescindibles”, también los inmigrantes. Pidió crear un modelo nuevo de integración, “un proyecto común de sociedad y hay que avanzar por ello hacia la simpatía y el respeto”. Como cristianos, afirmó, “hay que trabajar para que no haya primeras personas de primera clase o de segunda”.

La presidenta de la Asociación de Mujeres hispano-árabe, Randa Sayegh, animó a conocer a los inmigrantes acercándose a su cultura y a sus costumbres para mejorar la convivencia. “La sociedad española nunca ha discriminado a los inmigrantes”,a firmó, si bien “ahora ha habido cambios”. Denució, por ejemplo, que “hay muchas asociaciones que emplean el Islam para su propio interés”, algo que daña la integración.

El norteamericano Samuel Gregg, director de Investigación del Acton Institute, de Estados Unidos (un “think-tank” ecuménico que integra verdades judeocristianas con principios del libre mercado) pidió superar la distinción entre “izquierdas-derechas” y distinguir más bien entre la antropología materialista, y otra capaz de ver más allá del empirismo. La primera, no acepta la metafísica, ni cree en la libertad de decisión ni de pensamiento, se manifiesta como escéptica y utilitaria. La utilidad es el principal bien, el cual es considerado como el placer, es decir, aquello que cada uno considera como placentero. En esta antropología se podrían alinear Mill, Marx o Hume. Los derechos tendrían un carácter instrumental y se hallarían en manos de quien tuviera el poder.

La segunda, tendría en cuenta una visión metafísica y reconocería una visión superior de la vida humana, al ver más allá de las verdades empíricas, pues reconoce la capacidad para conocer la verdad, la belleza y el bien. Por tanto, abierta a lo trascendente y el principio de utilidad no sería el poderoso. En ella estarían alineados Aristóteles, Santo Tomás de Aquino o Tomás Moro. Los derechos aquí serían como las verdades universales susceptibles de ser reconocidas por todos.

En la misma mesa que Gregg, sobre antropología, habló Vicente Bellver Capella, Director General de Política Científica, de la Conselleria de Educación de la Generalitat Valenciana. Señaló que "para construir un mundo mas justo es necesario amar el mundo”, lo que supone mirar al mundo “con una mirada limpia" y “amar la dignidad del ser humano". También previno contra la reciente propuesta de ley sobre la "muerte digna" en España, señalando que hay que desactivar el juego manipulador de la eutanasia que a veces se nos quiere presentar con la etiqueta "digna".