La dirección espiritual canaliza sus afanes de lucha contra la mediocridad espiritual y contra el pecado, y sobre todo, el esfuerzo por identificarse cada vez más con los sentimientos, criterios y amores de Cristo en el cumplimiento de su voluntad. Los frutos, los cambios, indicarán, a modo de termómetro, si hay un buen aprovechamiento de la dirección espiritual.

Ayuda en gran manera a la persona que orienta el hacerse estas preguntas reflexionando seria y serenamente:

- ¿Está formando una conciencia más recta y delicada?

- ¿Vive la vida de gracia de manera habitual?

- ¿Vive sus deberes de religiosa cada vez con mayor entrega?

- ¿Comprende cada vez mejor el misterio de la voluntad de Dios en su propia vida? ¿La vive con más coherencia?

- ¿Ha aprendido a orar mejor?

- ¿Ha adquirido un conocimiento más personal de Jesucristo, por el cual ha llegado a amarlo más y a imitarlo más en aquellas virtudes que más necesita?

- ¿Se percibe un mayor entusiasmo por las cosas de Dios, los valores del espíritu y los grandes valores humanos?

- ¿Percibe más claramente la presencia de Dios en las cosas concretas, acontecimientos y sucesos, sean buenos o malos?

- ¿Es capaz de ser testigo de su fe en su ambiente?

- ¿Ama más a la Iglesia y es más activa en su celo apostólico? ¿Hay una mayor integración afectiva y efectiva con la Congregación como don de Dios para su vida?

- ¿Vive la caridad dentro y fuera de la comunidad con mayor delicadeza?


He aquí algunos aspectos sobre los cuales, de vez en cuando, deberá hacer un análisis detenido. Ciertamente necesitamos serenidad y paciencia, pues el cambio y la consolidación de una persona es cuestión de tiempo, de muchos años. Puede haber retrocesos, momentos de abandono, aflojamiento, pero si hay en la dirigida voluntad de seguir luchando, si va cristianizando cada vez más sus criterios, actitudes íntimas y su comportamiento, entonces la dirección espiritual va bien.

En su experiencia, ¿qué frutos ha sacado de la Dirección Espiritual? Comparta con nosotros su experiencia y participe en nuestros foros de discusión:Foro exclusivo para Religiosas en Catholic.net


 

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