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La comunicación del Evangelio
¿Se puede transmitir el Evangelio sin ser un hombre de fe? El P. Felipe Santos nos orienta en el modo en que los comunicadores católicos pueden vivir el evangelio para ser testimonio vivo de Jesús.


Por: P. Felipe Santos sdb | Fuente: .




La comunicación del Evangelio supone la transmisión de la fe en quien escucha. Por tanto, el testimonio debe aflorar en seguida en las palabras y en las imágenes.

Hay que lograr una comunicación que llegue a todos. Cada uno hará la selección respectiva de canal. Pero lo fundamental es que el mensaje evangélico vaya dirigido a cada individuo. La razón no es otra que la vida cristiana misma: debe llegar a cada persona.

K. Rahner afirma: Sólo cuando el cristianismo llega a cada hombre en su singularidad, la pastoral consigue un triunfo decisivo; y no solamente para su salvación personal, sino también para el bien espiritual de la Iglesia.

El mismo P. Gabel, sacerdote y periodista, uno de los primeros que se ocupó de las relaciones entre los medios modernos de comunicación y el Evangelio, afirmaba quelas técnicas de difusión prolongarán, extenderán, prepararán el encuentro interpersonal y la vida de la comunidad, pero no la reemplazarán nunca.

La Palabra de vida no puede transmitirse sino es por alguien que la viva, y no se recibe si no es en una comunidad que suscita la fe en Cristo. El apostolado en su plenitud exige una presencia y una comunidad.

Hay una dificultad muy seria: los medios, de por sí, tienden a distraer a la gente con programas de todo tipo, principalmente aquellos que enganchan al espectador con el divo, la diva o la narración. Los programas son variadísimos, pero el 99% tienden precisamente a la evasión y no a la reflexión personal.

Por eso, lo fuerte de la Pastoral de la Iglesia debe basarse en la información. Lo dice la Comunión y Progreso:Es distinto el lenguaje del púlpito y el de los medios de comunicación.

G. Hourdin dice que el periodista católico se situará, cueste lo que cueste, en una perspectiva cristiana. Esto le llevará verlo todo bajo el prisma cristiano. No puede olvidar que se dirige a personas que han perdido, en gran parte, el sentido de lo sagrado... Lo que importante es la realidad de Dios y de la Iglesia...Debe convencerse de que su labor es apostólica.

Hace falta que el comunicador tenga fe, sepa comunicarla según las características del medio que emplee.


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