Menu


Por la dureza de su corazón, Moisés les permitió divorciarse de sus esposas; pero al principio no fue así
Meditación al Evangelio 12 de agosto de 2022 (audio)


Por: Mons. Enrique Díaz | Fuente: Catholic.net



Discusiones graves y delicadas ha suscitado la ley sobre el reconocimiento de las uniones homosexuales como matrimonio. Ciertamente, debemos un respeto en su dignidad a las personas con preferencias sexuales diferentes y se tendrán que buscar leyes y caminos que protejan sus derechos y ayuden a parejas estables de hecho, pero ¡eso no se puede llamar matrimonio!

Las dos lecturas de este día nos proponen una imagen del matrimonio que dista mucho de lo que ahora pretendemos configurar como matrimonio. Ezequiel recuerda la alianza eterna que hace Dios con su pueblo. Ciertamente Israel en muchas ocasiones olvidó esta alianza y se prostituyó: “quebrantase mi alianza”, pero el Señor se mantiene fiel a esa alianza y propone una alianza nueva. Este es el sentido del matrimonio y no solamente uniones de conveniencia o de placer, sino compromiso serio de dos personas que juran y tratan de cumplir un amor estable.

Parejas de hecho, amor libre, divorcios al vapor, están destruyendo las familias y propiciando graves heridas en los hijos que crecen en la inseguridad y en los complejos que acarrea un divorcio. El mismo Jesús, en una sociedad que desprecia a la mujer y que la considera como un objeto, propone la fidelidad de la pareja como un principio original que se ha ido perdiendo con el tiempo.

La fidelidad y la estabilidad de la familia, las nuevas formas de familia propiciadas por la migración, las madres o padres solos, son retos que nos cuestionan y nos llevan a buscar nuevas soluciones donde podamos tener el hogar como una célula y una escuela de amor y protección.

Las situaciones de trabajo o estudio, los desplazamientos y las ausencias, no deben ser pretexto para descuidar la fidelidad de la pareja. Debemos mirar el ejemplo del mismo Señor que busca superar la infidelidad de su esposa Israel y que le profesa un amor fiel. ¿Qué podremos hacer por nuestras familias? ¿Cómo vivir en la fidelidad hoy?










Compartir en Google+




Reportar anuncio inapropiado |