Quizás en los últimos tiempos se le ha dado un poco de más importancia a la Palabra de Dios, pero aún nos queda mucho por hacer. Tenemos que reconocer que nuestra fe ha sido muchas veces más de oídas que de un conocimiento profundo. Cuando escuchamos este Evangelio, reconocemos toda la importancia que le daba Jesús a la escucha y al cumplimiento de la Palabra.

En la mayoría de nuestras comunidades y parroquias tenemos grupos bíblicos o de reflexión, muchas comunidades que están un poco más alejadas y no pueden tener su Eucaristía dominical, tienen su celebración de la Palabra. Todos estos servicios fortalecen la fe de cada uno de los creyentes. En el Evangelio de este día de ningún modo quiere Jesús menospreciar a su madre, todo lo contrario: hace una alabanza tanto a su madre como a sus parientes, reconociendo en ellos no sólo los lazos de la sangre, sino los lazos de la relación personal.

Escuchar la palabra del Señor nos fortalece e ilumina. Con frecuencia he tenido comunicaciones de personas que a través de estas reflexiones han tenido iluminación y fortalecimiento para sus vidas. Claro que necesitamos todavía incrementar mucho más esos espacios de reflexión. Es muy alentador cuando constatamos que muchas familias, padre, madre e hijos, tienen algún momento de reflexión y oración basándose en la Palabra de Dios. No basta oír la Palabra, la alabanza de Jesús es porque cumplen la voluntad de su Padre.

La Palabra nos ilumina para descubrir cuál es el camino que quiere Dios que sigamos. Si en cada momento, no sólo en los de angustia y dificultad, recurriéramos a nuestro Padre Dios y sinceramente le dijéramos “¿qué es lo que quieres de mí?”, nuestra vida tomaría otros rumbos. Con María, la que sabe escuchar la Palabra; con María, la que es modelo de aceptación y cumplimiento de la Palabra; con María que acompaña a Jesús en el cumplimiento de la misión, hoy también nos acercamos nosotros y decimos que queremos ser de los familiares de Jesús porque escuchamos su Palabra y queremos cumplir con la voluntad de su Padre.